Novedades Fondo HMC Deuda Privada Global diciembre 2024

El mercado de valores de EE. UU. cerró 2024 con un desempeño sólido. El S&P 500 registró un alza superior al 24% en el año, impulsado por el auge de la inteligencia artificial, la adopción de tecnologías emergentes, un crecimiento económico robusto y la agenda proempresarial de Trump. Estos factores han fortalecido las expectativas de flujos de caja y productividad, generando un entorno favorable para las acciones americanas.
En el mercado de bonos, el rendimiento del bono del Tesoro a 10 años mostró una alta volatilidad. Comenzando por debajo de 3,9%, alcanzando un máximo de 4,7% en el segundo trimestre, cayendo a menos de 3,7% en septiembre, y cerrando el año en 4,6%. La Fed redujo las tasas al rango de 4,25%-4,50%, buscando estimular la economía sin avivar la inflación. Analistas proyectan una estabilización de las tasas cerca del 4% para finales de 2025
En el segmento de los BDCs, el índice Cliffwater BDC finalizó el año con un incremento del 1,6% en su precio, manteniendo una prima cercana al 0,6% sobre el NAV y yield anual por dividendo del 10,34%.
Durante 2024, el Fondo HMC Deuda Privada Global (DPG) logró un desempeño positivo con un retorno total del 7,19% para la clase BP y 7,10% para la clase A. Por su parte, el Fondo HMC Deuda Privada Pesos (DPP) registró un retorno total del 3,08%, este menor retorno se atribuye a los costos que el fondo debe asumir debido a la cobertura de la moneda y los costos propios del vehículo.
El rendimiento anual por dividendo del Fondo DPG (USD) alcanzó el 11,20%, mientras que el del Fondo DPP (CLP) se ubicó en 11,14%, ambos superando el rendimiento anual por dividendo del índice Cliffwater BDC, que fue de 10,34%.
La volatilidad del Fondo DPG (USD) en el 2024 fue del 9,4%, inferior a la del índice Cliffwater BDC del 10,7% y la del S&P 500 del 12,4%.
Por su parte, se destaca la efectiva gestión tributaria del fondo, la cual ha posibilitado la reducción o recuperación del monto de impuestos retenidos sobre los ingresos generados por sus inversiones a lo largo del año. Este enfoque contribuye de manera significativa a una gestión financiera eficiente y efectiva, beneficiando a los inversionistas al mejorar el rendimiento neto de sus inversiones.

Desempeño de Activos Subyacentes del Fondo
En 2024, los fundamentales de los préstamos subyacentes se mantuvieron sólidos, impulsados por un desempeño crediticio saludable, un comportamiento del NAV y unos ingresos netos por inversiones alineados con los de la industria, además de un aumento en el monto de los dividendos distribuidos. Durante el último año, el tamaño del valor razonable de los portafolios creció en promedio, con compromisos netos positivos y una reducción en el apalancamiento. Asimismo, el porcentaje promedio de participación en tasa flotante se mantuvo en niveles representativos, superando el 90%, mientras que la deuda senior secured, deuda con mayor prioridad de pago, permaneció por encima del 80%. Estos indicadores reflejan la solidez y la gestión eficaz de las carteras subyacentes, destacando la capacidad de los gestores para preservar un perfil financiero saludable y adaptarse a las condiciones del mercado.
Todas las posiciones subyacentes del fondo, a excepción de una, tuvieron un impacto positivo en su rendimiento global. Se destacan siete posiciones que desempeñaron un papel significativo al aportar la mayor proporción de rendimiento, generando así un valor considerable para el portafolio.
El fondo cuenta con la exposición a dos fondos semi líquidos, con el propósito de disminuir la volatilidad y mejorar el rendimiento ajustado al riesgo. Ambos fondos aportaron positivamente al portafolio en términos de generación de retorno y disminución en la volatilidad.

Escenario Base para 2025
Inflación y Tasas de Interés: En 2024, la Reserva Federal de los Estados Unidos recortó las tasas de interés en 100 puntos básicos. Aunque los recientes recortes de tasas representan un cambio estratégico, se espera que el ritmo de los recortes futuros se desacelere debido a los riesgos de inflación y el sólido crecimiento económico. Es así como, se proyectan tan solo dos recortes adicionales por un total de 50 puntos básicos en 2025, lo que llevaría la tasa de los fondos federales a un rango de 3,75% a 4%, seguido de una posible pausa. Las proyecciones para 2025 indican que los rendimientos de los bonos del Tesoro a 3 y 5 años se mantendrán dentro de los rangos de 4,0% a 4,3% y 4,3% a 4,4%, respectivamente, alineados con los niveles actuales, lo que favorecerá la inversión en deuda privada.
Proyecciones para BDCs
Ingresos netos de la inversiones (NII): Las expectativas de ganancias de los BDCs a 12 meses han mostrado una tendencia a la baja, lo que sugiere que se ha alcanzado el pico. Con el inicio del ciclo de reducción de tasas, se espera una disminución en los ingresos por intereses. Sin embargo, la reactivación de la actividad de préstamos, impulsada por un mercado global más estable gracias a tasas más bajas, podría generar un aumento en las ganancias por tarifas de estructuración, además de reducir el riesgo asociado a los activos. El incremento en los ingresos por comisiones y la mayor estabilidad económica de las compañías, gracias a menores costos de deuda, contribuirán a mitigar el impacto de la reducción de tasas.
Dividend Yield: A medida que las tasas de interés disminuyen, los instrumentos de deuda privada a tasa variable pueden generar menores ingresos por intereses. Sin embargo, se espera que para el 2025 los rendimientos totales de los préstamos directos se mantengan por encima de los promedios históricos, respaldados por tasas base que aun se mantienen elevadas y sólidos márgenes de los préstamos. El rendimiento anual por dividendo de los Fondos DPG (USD) y DPP (CLP) ha permanecido estable entre el 10% y el 12%, incluso en entornos de bajas tasas de interés, como los observados en 2020 y 2021. Se proyecta que estas distribuciones continúen en dichos niveles durante el ciclo económico actual de tasas de interés.
Colocaciones: El volumen de transacciones en 2024 fue sólido en comparación con los mínimos alcanzados en 2022 y 2023, impulsado por la reducción de la brecha entre las ofertas de compra y venta. Para 2025, se anticipa una mayor actividad, con el resurgimiento de las fusiones y adquisiciones (M&A) como un motor clave de oportunidades de financiamiento, además de un robusto pipeline de adquisiciones liderado por firmas de private equity, respaldadas por niveles récord de dry powder, impulsará la demanda de financiamiento directo, ya que estas firmas dependen cada vez más de este mecanismo para adquisiciones apalancadas.